¿Cómo superar una infidelidad en pareja? - Una guía para reconstruir la confianza

Por: Lic. María de los Ángeles Larios García

La infidelidad es una de las experiencias más dolorosas y desafiantes dentro de una relación. No solo sacude la confianza, también genera estrés postraumático y una crisis emocional que puede sentirse abrumadora (para la parte afectada). Sin embargo, aunque el camino es complejo, muchas parejas logran salir fortalecidas si están dispuestas a trabajar juntas en el proceso de sanación. Siempre y cuando quien cometió la infidelidad se haga responsable de su actuar.

Basándonos en la teoría de John Gottman y en la experiencia clínica con parejas, compartimos a continuación algunas fases y pasos clave que pueden servir como guía para

quienes atraviesan esta difícil situación.No te preocupes por sonar profesional. Suena como tú. Hay más de 1500 millones de sitios web, pero tu historia es lo que lo diferencia del resto. Si vuelves a leer las palabras y no oyes tu propia voz en la mente, es una señal de que aún tienes mucho trabajo por hacer.

1. Afrontar la crisis inicial

El primer impacto de una infidelidad suele sentirse como un terremoto emocional. Marcado por emociones fuertes, pesadillas, flashbacks, y otros síntomas. En este punto es importante:

  • Quién cometió la infidelidad reconozca que los sentimientos: tristeza, rabia, confusión o desesperanza son respuestas naturales que deben ser validadas.

  • Aceptar la incertidumbre: la recuperación no es inmediata, requiere tiempo y paciencia.

  • Establecer límites claros: cortar contacto con la tercera persona y definir acuerdos iniciales ayuda a empezar a reconstruir un espacio de seguridad.

2. Procesar y entender lo ocurrido

Superar la infidelidad no significa “olvidar”, sino comprender y resignificar lo que pasó.

  • Explorar el por qué: entender los factores detrás de la infidelidad, sin justificarla.

  • Asumir responsabilidad: la persona infiel debe mostrar arrepentimiento genuino y evitar minimizar lo ocurrido.

  • Validar al otro: escuchar y reconocer el dolor de la pareja herida es indispensable.

  • Construir una nueva narrativa: hablar sobre lo sucedido permite transformar la historia de la relación y abrir posibilidades de sanación.

3. Reconciliación y reconstrucción de la confianza

La confianza se gana con constancia, transparencia y compromiso.

  • Decidir continuar: ambos deben elegir seguir adelante y comprometerse a sanar juntos. Eso implica nuevos acuerdos.

  • Ser transparentes: la rendición de cuentas y la apertura ayudan a disminuir la desconfianza.

  • Reforzar la comunicación: compartir emociones, necesidades y afecto fortalece el vínculo.

  • Redefinir la relación: establecer nuevas expectativas y metas en pareja ayuda a construir un lazo más sólido.

  • Celebrar los avances: reconocer los pequeños logros mantiene viva la motivación y el compromiso.

4. Crecimiento y cierre

Con el tiempo, muchas parejas descubren que esta crisis puede transformarse en una oportunidad de crecimiento.

  • Aprendizaje personal y de pareja: superar la infidelidad permite desarrollar resiliencia y madurez emocional.

  • Cierre emocional: llegar a un punto donde el recuerdo ya no cause el mismo dolor.

  • Nueva identidad de pareja: construir una relación renovada, más consciente y fortalecida.

Reflexión final

La infidelidad no tiene por qué marcar el final de una relación. Siempre y cuando ambas partes quieran continuar con la relación y quien cometió la infidelidad se haga responsable de los daños. Cada pareja tiene su propio proceso, y lo más importante es el compromiso mutuo para enfrentar el dolor, sanar y reconstruir. El camino no es lineal: habrá retrocesos y avances que pueden durar meses o años. Pero con paciencia, honestidad y empatía, es posible transformar la herida en un aprendizaje profundo.

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